El 11 de octubre, festividad de Ntra. Sra. De Begoña, se celebraba en Sestao los 50 años de vida parroquial en la Iglesia que nació siendo capilla de los colegios de Altos Hornos de Vizcaya, donde los Hnos. de la Salle y las Hijas de la Cruz enseñaban y educaban a los hijos e hijas de los trabajadores de la empresa. Pero la hermosa capilla respondió a una vocación más abierta y se convirtió en parroquia...
La Eucaristía fue presidida por Kerman, vicario episcopal de la zona, acompañado por José Antonio, sacerdote hijo de Sestao y por José Mari Delclaux que actualmente está en Sestao y ha tenido siempre una gran vinculación con las Hijas de la Cruz.
En la homilía se recordaron muchos retazos de historia vividos en esos 50 años y en los anteriores... Y se agradeció a Dios toda la vida, toda la pastoral, toda la inserción en la Diócesis y sobre todo en este pueblo sencillo y trabajador que es Sestao, pues la vocación de apertura de la capilla es aplicable a todo este pueblo, que ha acogido a tantas personas venidas de las diferentes regiones de la Península.
Se recordó a tantas personas: sacerdotes, religiosos y religiosas, laicos comprometidos e incluso personas no creyentes, pero de onda espiritualidad, que han hecho posible la vida y la labor realizada en estos años.
Es gozoso comprobar cómo la vida pastoral, la misión de enseñar sigue viva y nos tienen presentes en el afecto y la oración, aunque hace unos años que las hermanas han salido de Sestao.
Agradecemos al Señor de la Vida y de la Historia y a todos los que han hecho posible esta celebración.
(Maite Heredia)