Presentación del Libro de la Vida en el Centro de Meditación Cristiana de Roma
El domingo 29 de enero, en el Centro de Formación Meditación Cristiana (CFMC), Sor Annarita Tabloni presentó el Libro de la Vida para Laicos y Laicas con las Hijas de la Cruz. He aquí su discurso:
El Libro de Vida fue aprobado por unanimidad por los representantes Laicos y las Hermanas presentes en el Capítulo General celebrado el verano pasado en la Casa Madre de La Puye.
Yo estaba presente y no puedo ocultarles lo conmovidas que estábamos en aquel momento.
Este texto no fue el resultado de una operación de escritorio, de la reflexión de una élite de personas, ni del deseo de la Congregación de proponer líneas... sino de una experiencia internacional de compartir, de investigación, de fraternidad, de oración y de acción, vivida en diferentes partes del mundo y durante mucho tiempo.
Antes de todo está la vida: la que Dios nos regala cada día, hecha de personas y situaciones concretas, de encuentros, de historias que se entrecruzan y a través de las cuales Dios teje su Historia Sagrada.
Esta Vida se ha desarrollado y crecido de maneras muy originales y diversas: en torno a Comunidades o Hijas de la Cruz individuales, en parroquias, en colegios, en lugares de sufrimiento, con los pobres y los últimos, en grupos y asociaciones, en las más diversas actividades misioneras...
Con el paso del tiempo
- Nosotros, Hijos de la Cruz, hemos tomado cada vez más conciencia de lo que está escrito al principio de nuestras Constituciones (Regla de Vida).
"El don dado por Dios a nuestros Fundadores no es nuestra propiedad
sino nuestra herencia" (Lumen Gentium 43).
El sentido de nuestra existencia radica en que hemos recibido de Dios un Don, un Carisma que es Para la Iglesia y Para el Mundo.
Un Carisma nunca es una "propiedad" privada, exclusiva, reservada, sino una Herencia que ciertamente hay que custodiar y cuidar, pero sobre todo compartir.
- Por parte de los Laicos - en Italia desde los años 90 - se ha pasado de la colaboración en el ámbito apostólico-misionero-profesional al compartir: momentos de oración, asistencia a comunidades cada vez más abiertas y hospitalarias, momentos de vida y celebración, iniciativas compartidas, tiempos de formación en común.
Charisma tiene en sí misma un poder de Atracción precisamente porque es un Don de Dios y puede llegar a ser para alguien, para quien está llamado a compartirla, en cada estado de vida, un camino de salvación y de santidad.
He aquí las etapas del camino que condujo al Libro de la Vida:
A lo largo del tiempo ha crecido y se ha extendido en diferentes países del mundo la necesidad de conocerse, de caminar juntas, de participar más activamente en la espiritualidad, en la vida y en la misión de "enseñar y curar" de la Congregación.
Palabras como reciprocidad - saber dar y saber recibir - diversidad y complementariedad - corresponsabilidad - espíritu de familia - sentido de pertenencia... han tomado forma en experiencias concretas.
De toda esta experiencia nació el Libro de la Vida.
Todos los que viven el Carisma de alguna manera (grupos o individuos) han contribuido a la redacción del texto. También vosotros (ed. CFMC) habéis enviado vuestra contribución, profundizando las Fichas que se os han enviado a lo largo de los años y ofreciendo vuestras experiencias y reflexiones.
Este camino de comunión y de compartir no tiene necesidad de cualidades extraordinarias, de personas muy especiales como los Fundadores (aunque la Iglesia haya reconocido su santidad) ... pero el Espíritu Santo siempre nos precede y nos acompaña, y sabrá abrir caminos nuevos y compartidos para la Iglesia y para la humanidad.
Concluyo citando una bella expresión de Sor Marisa: "Experimentamos y nos formamos como compañeros y amigos de camino, pequeños, pobres, sencillos, frágiles, y lo que hemos recibido gratuitamente lo damos gratuitamente".